Existen muchos medios para el cultivo de las plantas de marihuana y el sistema hidropónico es uno de ellos. Su uso se ha incrementado en los últimos años como una forma más sencilla de conseguir una cosecha de cannabis en hogares con espacios reducidos o en macetas. Por eso, aquí te traemos la guía completa de cultivo con todos los detalles que necesitas conocer.
Lo primero que hay que tener claro es que no puedes usar tierra en este tipo de cultivo, sencillamente se hace en un medio de cultivo determinado, lo que hace que se incremente los resultados finales en una cosecha de cannabis abundante.
Paso 1: Elegir el sistema hidropónico para el cultivo
Para comenzar este cultivo debes elegir un sistema hidropónico existen muchos y cada uno cuenta con ventajas diferentes. Pero aquí te recomendamos al menos tres que puedes hacerlo incluso si es la primera vez que vas a realizar un cultivo de marihuana hidropónico.
Sistema de nutrientes en flujo o NFT
Tenemos de primero el más usado, el sistema de nutrientes en flujo conocido, por muchos expertos en este tipo de cultivo también lo llaman por sus siglas NFT utiliza una delgada película de solución nutritiva que fluye a través de las raíces, lo que ofrece eficiencia en el uso del agua y nutrientes.
Por lo general las raíces de las plantas deben ser expuestas a la solución y al aire para que la marihuana pueda tener una buena oxigenación. Muchos lo eligen por lo eficiente que resulta en el uso de agua y nutrientes.
Cultivo en agua profunda o DWC
La segunda opción para el cultivo hidropónico es el DWC o de agua profunda, en este caso las plantas se colocan en un recipiente con soluciones nutritivas oxigenadas. Pero las raíces están sumergidas por completo en el agua. Es necesario acompañar con una bomba de aire el cultivo para mantener altos niveles de oxígeno.
Muchos eligen este porque la planta de marihuana tiende a tener un crecimiento rápido y puede producir cosechas de cogollos de marihuana abundantes en poco tiempo.
Sistemas de goteo
Los sistemas de goteo consisten en una red de tubos y goteros que suministran solución nutritiva directamente a las raíces de las plantas. Este tipo de sistemas te permite un control preciso sobre la cantidad de agua y nutrientes que recibe cada planta.
Muchos lo prefieren porque de esta forma no necesitan un medio para el cultivo, sencillamente comprar e instalar el sistema de goteo, agregar los productos nutritivos y listo.
Cuando ya tienes el tipo de método para el cultivo de marihuana hidropónica que quieres es momento de elegir el medio de cultivo.
Paso 2: Medio de cultivo para marihuana hidropónica
El medio de cultivo es la base o el entorno donde la planta vivir, es por eso que si es un cultivo hidropónica debes elegir cuidadosamente el medio según tus necesidades y objetivos.
Fibra de Coco
El más usado es la fibra de coco porque es un medio orgánico que retiene bien la humedad y proporciona aireación a las raíces. Otras ventajas es que tiene un pH neutro, lo que facilita el manejo de los nutrientes en los cultivos hidropónicos.
Perlita
Otra opción es la perlita este material inorgánico ayuda a mejorar la aireación y el drenaje. Se vuelve un elemento ideal como medio cultivo porque no retiene nutrientes y esto es valorado en los cultivos de marihuana hidropónica porque te garantiza que todo lo que coloques le va a llegar directamente a la planta.
Rockwool
Una última opción es el Rockwool o lana de roca. Este es un medio de cultivo muy conocido en la hidroponía por proporcionar un buen soporte para las plantas. Aunque retiene muy bien la humedad, puede haber problemas porque puede ser alcalino, por eso debe lavarse bien antes de utilizarlo.
El sistema y el medio son los dos pasos que mas cuidado debemos tener durante un proceso de cultivo de marihuana hidropónica.
Paso 3: Crea un espacio para el cultivo hidropónica de marihuana
Parte del proceso es realizar la preparación del espacio de cultivo. En este aspecto debes considerar tener una ubicación adecuada que cuente con buena ventilación y acceso a electricidad, ya que necesitarás conectar luces y bombas.
Usar luces LED o HPS que imiten el espectro solar y proporcionen la intensidad es fundamental para asegurar éxito y también la distancia entre las luces y las plantas debe ser ajustable para evitar quemaduras y asegurar un crecimiento uniforme.
Otro factor importante es la temperatura que debe estar entre 20 y 28°C y la humedad relativa entre el 40 y el 70% para que se de forma exitosa el cultivo.
Paso 4: Preparar soluciones de nutrientes para la planta de marihuana
El último paso es preparar las soluciones con los nutrientes para el cultivo hidropónico de marihuana. En este tipo de cultivo las plantas dependen completamente de la solución nutritiva que preparas y les proporcionas.
Por eso debes tener cuidado y saber que nutrientes necesita específicamente la planta y si vas a usar alguno que vendan en una tienda, verifica que haya sido preparado específicamente para sistemas hidropónicos para que pueda aportar los macro y micronutrientes necesarios para un crecimiento óptimo de la planta de marihuana.
Por ejemplo, entre los macronutrientes que se necesitan estan el nitrógeno, fósforo y potasio, estos tres son esenciales para el desarrollo vegetativo y la formación de flores.
En el caso del nitrógeno este promueve el crecimiento de hojas y tallos, el fósforo es crucial para la formación de raíces y flores, y el potasio ayuda en la regulación del agua y en la resistencia a enfermedades.
Otros adicionales en el campo de los macronutrientes que pueden ser útiles son el calcio, el magnesio y el azufre que ayudan en diferentes aspectos las plantas.
Si vamos a los micronutrientes, elementos como hierro, manganeso, zinc, cobre, boro y molibdeno se necesitan como adicionales, pero son igualmente vitales para procesos como la fotosíntesis y la síntesis de clorofila.
Con esto en mente estas listo para hacer tu mezcla y ponérsela a tu cultivo hidropónica. Recuerda que, como cualquier planta, la marihuana necesita de cuidados para su crecimiento, este tipo de cultivo ha llegado revolucionando la forma por la rapidez en que una planta consigue el crecimiento y la cosecha de sus flores.
Si te animas a hacerlo, no olvides mantener siempre las raíces bien oxigenadas y con el sistema hidropónica en optimo funcionamiento para tener resultados exitosos.